Antes que ellos, señalaron políticas y rumbos, precedentes y fueron ejemplo de capacidad organizativa y eficiencia, varios inspectores de tránsito de recordado desempeño en ciudades del país.
Las antiguas inspectorías de vehículos eran organismos públicos cuyos titulares se contaban entre los funcionarios de mayor jerarquía y confianza en las capitales de estados, municipios y en el Distrito Federal. No sólo normaban la circulación y castigaban a los infractores. Expedían el Título (luego las licencias) para conducir automotores. También las matrículas incluso para los vehículos de tracción de sangre.
El ministro para las Relaciones Interiores, Justicia y Paz, Miguel Rodríguez Torres, presidió el martes 9 de septiembre de 2014, la incorporación de 4.600 efectivos del Cuerpo Técnico de Vigilancia y Transporte Terrestre (CTVTT) a la Policía Nacional Bolivariana (PNB) para consolidar la nueva estructura de los cuerpos de seguridad del país. Con esta figura desaparecen los fiscales de transito adscritos al Ministerio de Transporte a través del Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (INTTT o INTT).
Con llegada a partir de 1904 de los primeros vehículos automotores surgió al cabo de una década la vigilancia vial ejercida las policías estadales y municipales. Fueron naciendo los cuerpos de vigilancia de carácter y jurisdicción estatal, y con esto los denominados fiscales de tránsito, quienes sólo tenían jurisdicción dentro de cada entidad federal.
Al quedar sancionada la Ley de Tránsito Terrestre de 1955 que entró en vigencia el 1 de julio de 1956, se creó la Dirección de Vigilancia de Tránsito establecida el 16 de octubre de 1956 dependiente del Ministerio de Comunicaciones, con el objetivo de centralizar los aspectos administrativos, técnicos y de vigilancia, que para entonces operaban sin una unidad doctrinaria, bajo la jurisdicción de cada estado.
Los conocidos hasta aquella fecha como fiscales de tránsito pasaron a llamarse vigilantes de tránsito.
El Cuerpo de Vigilancia se organizó en siete regiones.
La Gaceta Oficial N° 5.420 del 26 de junio de 1998 ofreció el texto del Reglamento de la Ley de Tránsito Terrestre. Tuvo por objeto desarrollar las normas contenidas en la Ley de Tránsito Terrestre, en todo lo relacionado con el tránsito terrestre por vías públicas y privadas destinadas al uso público, permanente o casual.
Precisó que el tránsito de vehículos y personas dentro del territorio nacional deberá someterse a las normas y requisitos generales que sobre tránsito terrestre se establecen en la Ley, su Reglamento y demás normas legales. También que se aplicarán con preferencia a las disposiciones contenidas en tratados, convenios y acuerdos internacionales sobre Tránsito Internacional y Transporte Comercial, en los que Venezuela sea parte. “El tránsito de ferrocarriles se regirá por leyes especiales” –precisa el documento.
La novedad es que ahora existe el Cuerpo Especial de Tránsito de la Policía Nacional Bolivariana, con efectivos desplegados en las carreteras, avenidas, autopistas y troncales del territorio nacional para atender cualquier situación y garantizar la seguridad ciudadana. Explicó el ministro Rodríguez Torres que los funcionarios fueron homologados a través de la Universidad Nacional Experimental de la Seguridad (Unes).
El ministro Rodriguez Torres informó que actualmente se trabaja en la creación de un programa de seguridad en las principales vías del país con el trabajo conjunto de los cuerpos de seguridad del Estado, para complementar los dispositivos aplicados en las ciudades, patrullaje inteligente y corredores seguros.
En Caracas subsistían menos de 300 agentes del Cuerpo Técnico de Vigilancia de Tránsito Terrestre, reconocidos por el uniforme con los colores marrón y beige.
“Tenemos la misión de garantizar el bienestar de la gente en las calles. Por eso, me siento orgulloso de ser parte de este gremio”, respondió tiempo atrás a un reportero de El Universal, el fiscal Epiménides Peña, con años de servicio en las calles de la capital.
El uniforme ya casi no se ve en el país. Desde que se creó la Policía Nacional pesaba una condena de muerte sobre el organismo. Los fiscales de tránsito migraron a la Policía Nacional Bolivariana o, en el peor de los casos, se retiraron. Sólo 280 funcionarios sobreviven en el antiguo cuerpo de vigilancia vial.
Los fiscales devengaban un sueldo básico de 1.700 bolívares, lo que ha causado controversia sobre el tema de la homologación. Aseguran que un sargento con 15 años de experiencia en tránsito no gana más de 2.000 bolívares. Los funcionarios rasos de la Policía Nacional al comenzar devengaban 3.000 bolívares.
“Al principio se contaba con aproximadamente 8.500 funcionarios en el país. De esa cantidad, 2.000 fueron transferidos a la Policía Nacional. Cada vez menos, la mayoría se desempeñaban en Caracas¬. La mayoría de los funcionarios que existían hace seis años se negaron a abandonar el organismo u optaron por retirarse. “Con el traspaso de los agentes de tránsito a la Policía Nacional se perdieron algunos logros obtenidos en una lucha de años”, declaró un antiguo funcionario del cuerpo.
Últimamente hubo máximo 30 patrullas y medio centenar de motocicletas para la supervisión de las vías, constituían el parque motorizado de apoyo que ahora será ampliado –según lo informó el ministro Rodríguez Torres. Antes de finalizar el año se incorporarán 3.000 nuevos vehículos - entre patrullas, motocicletas, ambulancias y grúas - para el patrullaje Inteligente en el país –preciso el Ministro.
Entre otras acciones para fortalecer la seguridad en todo el territorio nacional, Rodríguez Torres se refirió a la creación de los puntos de atención integral en todas las grandes vialidades del país, "para que la gente cuando esté circulando por las grandes carreteras del país sepa que tiene a quién acudir a la hora de una emergencia".
La labor de los fiscales de tránsito era apoyada por más de 500 policías viales distribuidos en los municipios del Distrito Capital y por 800 de las Vías Rápidas de la Policía Nacional.
En el caso específico de la Policía Municipal de Chacao, trascendió que la obligación de homologar los servicios, determinó el rechazo generalizado a pasar a ser agentes policiales municipales, armados, en lugar de los especializados sólo en dirigir y atender los casos relativos a la circulación vehicular en las calles del municipio. Costó trabajo convencer a todos los adscritos a tránsito para que tomaran los cursos de adecuación según una normativa nacional. Algunos optaron por retirarse. Sólo aceptaban continuar como agentes de tránsito terrestre.
Lidiar con las armas de fuego se convirtió en otro reto para los fiscales de tránsito que migraron a la Policía Nacional. Un agente activo por necesidad de trabajar aseguró que no se acostumbra a colocar el dedo en el gatillo. “Ningún entrenamiento te da fortaleza para disparar contra un ser humano”.
“Yo creo que se nace policía, así como se nace fiscal de tránsito. Hasta ahora no he tenido con disparar, pero solamente pensar que algún día llegará el momento me pone nervioso. No me queda otra, necesito ganar dinero para mantener a mi familia. Además, los funcionarios que quieren ocuparse del tránsito no cuentan con la preparación requerida para ejercer, pues se les dictan cursos muy básicos”, explicó el declarante que optó por solicitar el anonimato.
Durante 34 años se celebró el Día del Vigilante de Tránsito el 1 de julio, no obstante, la fecha oficial que le dio vida a la institución fue el 16 de octubre, razón por la cual desde el año 1992 se celebra ese día el Día Nacional del Vigilante del Tránsito.
En 1957 se elaboró una Plan de Educación Vial Escolar que contempló las patrullas escolares de seguridad de tránsito. Lo amplía entre 1958-1959 la División de Educación y Divulgación Ciudadana, a la cual se le sumaron Ford Motors de Venezuela, con apoyo a la capacitación, entrenamiento y divulgación de estos pequeños servidores públicos y Fundación de Educación y Seguridad Vial (FESVIAL), desde su fundación en 1986, la cual construyó un parque vial en un sector del Este de Caracas. La finalidad ha sido complementar la educación impartida en las aulas para que la educación vial forme de la personalidad del niño.
Es un programa permanente que se desarrolla a nivel Nacional en los planteles privados y públicos, con participación de niños que cursen entre el cuarto y el sexto grado de educación básica que cumplen la función de proteger a sus compañeros en el cruce de avenidas y calles próximas a los institutos educacionales.
El presidente Hugo Chávez dispuso al comienzo de su primer gobierno la creación de una comisión interministerial para la seguridad y la educación vial (CIAPEV), adscrita al ministerio de Educación. Tuvo fructífero desempeño mientras estuvo al frente de la misma el profesor Elio Aguilera. Pero luego, perdió fuerza y en material de educación y seguridad vial no poco está pendiente.
Bolsa a Padre Sierra. Coches, líneas para e tranvía, autos y camiones comparten la vía en ambas direcciones. Finales de los los años 20 inicios de los 30. |
Los semáforos llegaron a Caracas con la democracia del 37. También la señalización moderna de las normas de circulación |
Agente de policía municipal de comienzos de la década de 1940 en una calle céntrica de Caracas. Tenían funciones como funcionarios de tránsito terrestre |
Motorizados de las Fuerzas Armadas Policiales del Distrito Federal |
El agente de Policía Municipal del DF vistiendo guantes blancos en 1967. Se ocupaba del tránsito terrestre, como el célebre y tan bien recordado Apascacio Mata |
Patrullero escolar. Tomado de El Univresal. |
Importante función voluntaria. |
Un experimentado funcionario de los ahora eliminados
fiscales de tránsito del INTTT
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definitivamente se debe crear la Policía Nacional de transporte...... aéreo , marítimo y terrestre,especializada que se encargue del control vigilancia de las infracciones y delitos en los aeropuertos , puertos y vias carrereras del paiz.. que sean honestos honorables y dignos que protejan y sirvan de verdad,,,
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